domingo, 20 de noviembre de 2011

IVÁN ILLICH: LA SOCIEDAD DESESCOLARIZADA


 La sociedad desescolarizada:
 
 Es  una crítica a la educación tal y como se lleva a cabo en las economías "modernas". Lleno de observaciones críticas sobre los planes de estudios de su tiempo, el libro puede parecer desfasado, pero sus afirmaciones y propuestas básicas siguen siendo tan radicales hoy como lo fueron en su momento. A través de ejemplos reales sobre la naturaleza ineficaz de la educación escolarizada, Illich se mostraba favorable al autoaprendizaje, apoyado en relaciones sociales libremente intencionadas en encuentros y conversaciones fluidas e informales.

En este libro,  el autor parte con el anunciado de que la sociedad, puede desescolarizarse, es decir, no basta con intentar mejorar la educación desde su interior, o sea, no con   nuevas actitudes de los maestros hacia sus alumnos, ni la proliferación de nuevas herramientas y métodos físicos o mentales (en el aula o en el dormitorio), ni, el intento de ampliar la responsabilidad del pedagogo hasta que englobe las vidas completas de sus alumnos, nada de esto dará por resultado la educación universal. La idea de desescolarizar la sociedad, alude al hecho de que cada individuo, haga de cada momento de su vida, un momento para aprender. Este libro plantea que no sólo las instituciones deben desescolarizarse, sino también el ethos de la sociedad.

El libro es más que una crítica, pues contiene propuestas en positivo para reinventar el aprendizaje a lo largo de toda la sociedad y de toda la existencia de cada individuo.


PAULO FREIRE: PEDAGOGÍA DEL OPRIMIDO


 La pedagogía del oprimido

Este libro toca muchos aspectos bastante importantes y lo que intenta es que el individuo se forme, no formarlo. Propone que las situaciones de aprendizaje emanen de las vivencias que constantemente enfrentan en su cotidianeidad. Pero puede llegar un punto denominado “situaciones límite”; lo más importante es la liberación de los oprimidos en su justa medida, es decir, sin que se conviertan en opresores.

Como ideas que aparecen en su libro, me parece interesante citar también que él quería un  despertar en el espíritu crítico, es decir, no quería solamente enseñar a leer y a escribir, sino liberar al hombre del silencio en el que se encontraba.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

TEORIA CONSTRUCTIVISTA



El constructivismo es una corriente de la didáctica que se basa en la teoría del conocimiento constructivista. Postula la necesidad de entregar al alumno herramientas que le permitan crear sus propios procedimientos para resolver una situación problemática, lo cual implica que sus ideas se modifiquen y siga aprendiendo. El constructivismo en el ámbito educativo propone un paradigma en donde el proceso de enseñanza-aprendizaje se percibe y se lleva a cabo como proceso dinámico, participativo e interactivo del sujeto, de modo que el conocimiento sea una auténtica construcción operada por la persona que aprende (por el «sujeto cognoscente»).

Se considera al alumno como poseedor de conocimientos que le pertenecen, en base a los cuales habrá de construir nuevos saberes. No pone la base genética y hereditaria en una posición superior o por encima de los saberes. Es decir, a partir de los conocimientos previos de los educandos, el docente guía para que los estudiantes logren construir conocimientos nuevos y significativos, siendo ellos los actores principales de su propio aprendizaje. Un sistema educativo que adopta el constructivismo como línea psicopedagógica se orienta a llevar a cabo un cambio educativo en todos los niveles.